lunes, 16 de agosto de 2010

BULIMIA


La bulimia o bulimia nerviosa es un trastorno mental relacionado con la comida. "Bulimia" proviene del latín būlīmia, que significa hambre en exceso. Esta enfermedad afecta a los jóvenes y se manifiesta con más frecuencia en las mujeres.


Su característica esencial es que la persona sufre episodios de atracones compulsivos (ingerir en un tiempo inferior a dos horas una gran cantidad), seguidos de un gran sentimiento de culpabilidad y sensación de angustia y pérdida de control debido a que se sienten muy avergonzados de su conducta. Los atracones se realizan a escondidas lo más disimuladamente posible. Los episodios suelen planearse con anterioridad y se caracterizan por una rápida ingesta de alimento. Suele alternarse con episodios de ayuno, pero al poco tiempo vuelven a sufrir episodios de ingestas compulsivas.

Los bulímicos tienen cerca de 15 episodios de atracones y vómitos por semana y, en general, su peso es normal, por lo que resulta difícil detectar la enfermedad. Los individuos con este trastorno son incapaces de dominar los impulsos que les llevan a comer e intentan ocultar los síntomas,


Otra característica de este trastorno son las conductas inapropiadas para evitar la ganancia de peso. Muchos utilizan diferentes medios para intentar compensar los atracones: el más habitual es la provocación del vómito. Los efectos de vomitar consisten en la desaparición inmediata del malestar físico y la disminución del miedo a ganar peso. Otras conductas de purga son: el uso excesivo de laxantes y de diuréticos, enemas, realización de ejercicio físico muy intenso y ayuno.

Tipos de bulimia

Según el tipo de purga que utiliza para compensar el atracón, existen dos tipos de bulimia:

Tipo purgativo: cuando se utiliza como compensatorio el vómito, los laxantes, los diuréticos, jarabes, para eliminar lo más pronto posible el alimento del organismo.

Tipo no purgativo: cuando se utiliza como compensatoria el ejercicio físico intenso o no se hace nada o se hace mucho ayuno. El tipo no purgativo es un método menos efectivo de eliminar del organismo un número tan elevado de calorías.

Causas

En esta enfermedad intervienen factores biológicos, psicológicos y sociales que cambian la visión que el enfermo tiene de sí mismo generando como respuesta un gran temor a engordar. El enfermo de bulimia siempre se ve gordo, pero no puede reprimir sus ansias de comer. La bulimia se manifiesta tras haber realizado numerosas dietas sin control médico. La limitación de los alimentos impuesta por el propio enfermo le lleva a un fuerte estado de ansiedad y a la necesidad patológica de ingerir grandes cantidades de alimentos (atracón).

La bulimia se basa en la idea de que sólo a través de la delgadez y su atractivo, se podrá triunfar en la sociedad, suele presentarse con un fuerte sentimiento de inseguridad y con problemas graves en la autoestima, en relación directa con el peso o con su imagen corporal. La bulimia nerviosa se inicia generalmente en la adolescencia o al principio de la vida adulta.

Síntomas de Bulimia

Generalmente las personas que padecen bulimia han sido obesas o han realizado numerosas dietas sin control médico. Tratan de ocultar los vómitos y las purgaciones, por lo que la enfermedad suele pasar desapercibida durante mucho tiempo. Los síntomas típicos de bulimia son los siguientes:

* Atracones o sobre ingesta de alimentos: El enfermo come una gran cantidad de alimentos en un espacio de tiempo muy corto. No tiene control sobre la ingesta y es tal la ansiedad que cree que no puede parar de comer.

*Se provoca vómitos, utiliza laxantes, diuréticos, fármacos, o recurre a otros medios para prevenir el aumento de peso

*La autoestima del enfermo es baja y la identifica con su cuerpo.

*Se producen otros cambios físicos y emocionales (depresión, ansiedad) que manifiestan el desarrollo de la enfermedad. Los bulímicos se ven gordos, se avergüenzan de su cuerpo y lo rechazan, por lo que intentan hacer dieta en todo momento.

*Pueden llegar a gastar una gran cantidad de dinero en comida o recurrir a la que ya hay en casa, que comienza a desaparecer misteriosamente de la despensa.

*No sienten ningún placer al comer ni preferencias en cuanto al tipo de alimentos, sólo buscan saciarse.

*Intentan evitar los lugares en los que hay comida y procuran comer solos.

*Su comportamiento suele ser asocial, tienden a aislarse, y la comida es su único tema de conversación.

Diagnósticos

El médico sospecha bulimia nerviosa si una persona está demasiado preocupada por el aumento de su peso, y si existen signos evidentes de una utilización excesiva de laxantes.

Otras pistas incluyen cicatrices en los nudillos por haber usado los dedos para inducir el vómito, erosión del esmalte dental debido al ácido del estómago y un valor bajo de potasio sanguíneo. Sin embargo, el diagnóstico dependerá de la descripción del paciente de una conducta comida excesiva-purga.

El diagnóstico resulta complicado ya que los episodios de voracidad y vómitos se ocultan con facilidad. Además, algunos síntomas pueden ser confundidos con los de otras patologías. Para un diagnóstico adecuado es necesaria una entrevista psiquiátrica que demuestre la percepción que el enfermo tiene de su propio cuerpo y la relación que mantiene con la comida.

Es necesaria una exploración física completa para detectar los trastornos fruto de su comportamiento alimenticio. Los objetivos del tratamiento son corregir los trastornos alimenticios y psicológicos de la enfermedad.

Tratamiento

El tratamiento resulta más eficaz en las primeras fases del desarrollo de este trastorno pero, como la bulimia suele esconderse fácilmente, el diagnóstico y el tratamiento no suelen presentarse sólo hasta que este problema ya se ha convertido en un ingrediente permanente en la vida del paciente.


Varios centros de tratamiento en instituciones ofrecen apoyo a largo plazo, consejería e interrupción de los síntomas. Las dos aproximaciones al tratamiento son la psicoterapia y los fármacos. La forma más común de tratamiento actualmente incluye terapia, que suele ser terapia de grupo psicoterapia o terapia cognitivo-conductual (individual). Las personas con anorexia o con bulimia suelen recibir el mismo tipo de tratamiento y formar parte de los mismos grupos de tratamiento. Esto se debe a que en muchos casos los pacientes padecen de ambos padecimientos, de manera simultánea. Algunos denominan a este fenómeno "intercambio de síntomas". Estas formas de terapia se centran tanto en los síntomas que llevan al individuo a presentar estos comportamientos como en los síntomas relacionados con la alimentación. Con la terapia, muchos psiquiatras recetan antidepresivos.

Los antidepresivos se presentan en diferentes formas, y el que ha mostrado resultados más prometedores es la fluoxetina o Prozac. Es posible que otros muchos medicamentos funcionen, pero hasta ahora el Prozac ha mostrado los resultados más positivos.

La prontitud del tratamiento es uno de los factores más importantes para dar un pronóstico. Aquellas personas que lo reciban en las primeras fases del trastorno tendrán una recuperación más alta y más permanente.

Es mejor que la psicoterapia la realice un terapeuta con experiencia en alteraciones del apetito, pudiendo resultar muy eficaz. Un fármaco antidepresivo a menudo puede ayudar a controlar la bulimia nerviosa, incluso cuando la persona no parece deprimida, pero el trastorno puede reaparecer al interrumpirse la administración del fármaco.

Cuando se presenta un alto nivel de gravedad se puede recurrir a la hospitalización. En primer lugar se trata de evitar los vómitos, normalizar el funcionamiento metabólico del enfermo, se impone una dieta equilibrada y nuevos hábitos alimenticios. Este tratamiento, está encauzado hacia la recuperación física.

Cualquier tratamiento implica la colaboración de la familia, ya que en ocasiones el factor que desencadena la enfermedad se encuentra en su seno.

Efectos de la bulimia:

*Neumomediastino (entrada de aire al interior de la cavidad toráxica)

*Pancreatitis.

*Hipopotasemia (niveles bajos de potasio en la sangre)

*Arritmia cardíaca

*Ansiedad o compulsión por comer

*Abuso en el consumo de medicamentos laxantes y diuréticos

*Seguimiento de regímenes dietéticos diversos

*Deshidratación

*Alteraciones menstruales y amenorrea; esterilidad

*Incremento y reducción bruscos de peso, desestabilidad en el peso.

*Aumento en la frecuencia de caries dentales

*Aumento del tamaño de las glándulas salivales e infección de estas

*Pérdida de cabello

*Desmayos muy frecuentes, mareos

*Heridas de la mucosa bucal

*Alteración o pérdida esmalte dental

*Dolores de cabeza y migraña

*A largo plazo junto con otras complicaciones puede producir tumor de laringe o garganta, no siempre benigno

*Dolores en la garganta (luego de vomitar)

*Piel seca

*Debilidad en las piernas



WEBGRAFÍA


No hay comentarios:

Publicar un comentario