viernes, 11 de noviembre de 2011

MI VIDA EN EL COLEGIO

Durante nuestra adolescencia e infancia, pasamos la mayor parte del tiempo en el colegio o en la escuela, tanto que pasamos a considerarlo nuestro segundo hogar, las experiencias y recuerdos adquiridos son maravillosos e inolvidables, aquellos momentos de felicidad y de tristeza, las evaluaciones, los regaños, los triunfos, las picardías, los profesores, los amigos… etc., todo pasa a ser parte de nuestra historia, de nuestro pasado, convirtiéndose en las bases de nuestro futuro. Como olvidar una de las épocas más bonitas de nuestra vida, donde no solo aprendíamos a leer y a escribir sino que comenzamos a relacionarnos con otras persona a compartir experiencias y a ser parte de la vida y la historia de otros?...
Siempre recordaremos a ese profesor que nos regañaba en sus clases, al compañero loco del salón que siempre nos hacía reír. Las travesuras en el colegio y por supuesto las pequeñas mentiras que decíamos para justificar el no presentar la tarea o aquellas ayudas durante las evaluaciones donde con señas y muecas resolvíamos las dudas que se nos presentaban o bien garantizábamos pasar la evaluación…
Momentos y experiencias que reviven en nuestra mente aun con más fuerza cuando estamos por culminar esta etapa, y bueno ya que la mía esta casi por finalizar quisiera compartir con ustedes parte de ella…


Estudie en Moniquirá toda mi primaria, en el Instituto Integrado Nacionalizado “Antonio Nariño”  sede Anexa, siempre me destaque por ser una de las mejores estudiantes del colegio y por representar al colegio en diferentes eventos de Ajedrez, mi deporte favorito, esta fue una época muy bonita; me divertí mucho con mis compañeros, recuerdo los recreos en los que corríamos y saltábamos, donde jugábamos “cogidos”, escondidas, “congelados”…etc., las clases de matemáticas; ya que me gustaba mucho resolver problemas con divisiones y fraccionarios. Recuerdo también el proyecto de reciclaje que junto con dos compañeros mas y mi profesor Luis Rodrigo llevamos a cabo en el colegio y la siembra de árboles alrededor del colegio como recuerdo de “nuestra promoción”, las ocasiones en que fui a representar a mi colegio en ajedrez en los juegos intermunicipales y como olvidar a mis cómplices y amigas Marcela, Lorena, Laura e Ingrith con quienes nos divertíamos corriendo por toda la cancha de baloncesto o simplemente caminado por el colegio.
Fue muy duro para mi pasar de primaria a secundaria, ya que no solo dejaba “atrás”  el colegio donde estudie seis años, dejaba a mis amigas,  muchos de mis recuerdos y los seis mejores años de mi vida hasta ese momento, ya que iba a estudiar en otro pueblo: Puente Nacional.
Llegue a la ENSAS gracias a Rafael Reyes un gran amigo de mis padres, quien confiado de la gran educación que me seria impartida aquí, logro convencer a mis padres de inscribirme; gracias a Dios logre entrar sin problemas, todo gracias a mis excelentes calificaciones fruto de mi esfuerzo durante mis primeros seis años de estudio.
Recuerdo como si fuera ayer mi primer día de clases, estaba muy nerviosa por no decir que asustada, no conocía a nadie, ni siquiera sabía que el colegio era tan grande, recuerdo la reunión en el patio central donde el profesor Napoleón nos dijo: “todos los estudiantes hagan una fila según el grado al que vallan a ingresar”, una vez hicimos la fila, comenzó de séptimos en adelante, nosotros los de sexto quedamos de ultimas y después al azar nos asigno un curso determinado, en mi caso 6A, después conocimos  a nuestra directora de grupo, la profesora Imelda Peña. Después de esto y algunas indicaciones más por parte de algunos profesores decidí conocer el colegio así que fui a caminar un rato…
Sexto fue un año muy especial ya que conocí personas muy agradables y amigas inolvidables, como grupo éramos muy unidos; generalmente solíamos jugar en los descansos, jugamos futbol, baloncesto incluso beisbol…lamentablemente a final de año tuvimos que separarnos ya que solo podían haber tres séptimos y éramos cuatro sextos, así que nos desintegraron.
El siguiente año fui asignada a 7-B el curso con el cual he estudiado desde entonces, al comienzo fue algo duro ya que no quede con los amigos del año anterior así que debía buscar nuevos amigos, además me sentía rechazada por el grupo, pero poco a poco fui adaptándome a este nuevo cambio y hasta el momento me ha ido muy bien. En este grupo también encontré grandes amigas entre ellas Dalia Orozco, nuestra “estrella” y Mónica Coronado la “artista” y posteriormente en el 2009 a Paula Gamboa una persona admirable, todas ellas grandes amigas y compañeras.
Esta época se caracterizo por ser una época de cambios no solo cambie de curso, sino pasamos de la doble jornada a una jornada continua, poco después de una jornada de seis horas y media a una de seis, cambio de algunos profesores, la muerte de la profesora Nubia Guasgüita, mi profesora de biología y una de las profesoras que mas quise y recuerdo. Una acreditación de calidad, donde con mucho esfuerzo la normal logro una acreditación de calidad con la calificación de excelencia.
Finalmente este año ya estoy en 11 un año muy importante ya que es la puerta de entrada para una época más en mi vida; “la vida universitaria”, a pesar de que no me fue tan bien en el ICFES como quería, no me voy a detener, seguiré adelante con mis sueños, y luchare por ser una gran medico como he querido siempre, se que con la ayuda de Dios esto va a ser posible.
En este año en mi interior se han cruzado una gran variedad de emociones; alegría por los logros obtenidos y por poder graduarme sin perder materias en mis 12 años de estudio, tristeza y nostalgia por despedirme (aunque no para siempre) de mis amigos y compañeros, por dejar atrás 12 años de vida, con recuerdos inolvidables que estarán en mi mente y en mi corazón durante muchos años, y ansiedad y duda por no saber qué es lo que me depara el futuro, pero con  mucho entusiasmo por seguir mi camino y lograr mis sueños.